Consejos para nochebuena

Ya estamos en plenas fiestas navideñas y los compromisos familiares y con los amigos se han multiplicado. Nos volvemos locas pensando en cómo nos vestiremos y en cómo vamos a decorar la casa cuando vengas los invitados a comer o a cenar. Saber preparar estas citas con “glamour” e innovando parece difícil, todo un reto que pese a que se repita año tras año, nos sigue pillando en bragas. Vamos a ver si con estos consejitos este año conseguimos estar a la altura de las circunstancias.


Colocar la cubertería
Ppuede ser una prueba facil de superar si se siguen algunas pautas. La colocación de los cubiertos en la mesa marca la diferencia entre una buena cena y una buena cena con clase. A la izquierda del plato se colocan, de dentro hacia fuera, el tenedor principal seguido de el tenedor para pescado o carne o el del primer plato. A la derecha, al lado del plato, se coloca el cuchillo principal, después la cuchara de la sopa o el cuchillo del primer plato. En la parte superior se situa la cuchara o el tenedor de los postres y la cucharilla del café. En el caso de que se requiera un cuchillo para comer el postre, este se llevará a la mesa en el momento en que se sirva.

Flores en la mesa
La mesa, en estos días, se convierte en el centro neurálgico de todas las operaciones. Será el centro de atención de todas las miradas, por eso es necesario vestirla de gala. Copas altas de cristal y platos sin cenefas son muy recomendables para hacer presente la elegancia. También son esenciales los centros florales. Como su propio nombre indica acostumbran a colocarse en el centro y la forma varia segun el tamaño y diseño de la mesa. Si la mesa es rectangular los centros florales son alargados y si la mesa es redonda estos también. Si podemos es mejor conseguir flores naturales, que transmiten frescura y aroma, pese a que tengamos que comprender su caducidad.

Libertad en los colores para vestir
Por excelencia, el rojo es el color para las mujeres en estas fiestas. No sólo en la ropa interior. Pero la gracia de estas fiestas es que nunca vas demasiado arreglada, por lo cual además del elegante negro puedes tirar de colores como el dorado o el plateado. Pero como a veces la economía no da para mucho tendremos que saber combinar las piezas, para repetirlas con estilo, sin que se note. Cambiar de top, o de falda, o de chal... Y es el mejor momento para vestir de largo. Hay pocas ocasiones en las que podamos lucir este precioso vestido que sólo usamos en una boda o en un bautizo, esta es una de ellas.


Sea como sea, el objetivo es salir con la cabeza bien alta de las comidas o actos que organicemos. Ser una buena amfitriona cuesta poco, sino que se lo digan a Isabel Preysler que con unos bombones lo soluciona. A nosotras nos costará un poquito más pero vale la pena. La elegancia y el saber estar no son exclusividad de dueñas de mansiones.

¡FELICES FIESTAS A TODOS!