Cómo conseguir un buen bronceado (I)

En esta época somos muchas las que entre otras cosas, buscamos un buen bronceado, dorado, uniforme, bonito y que nos favorezca para lucir mejor con nuestros vestidos, shorts...

Para conseguir un buen bronceado es necesario saber que nos enfrentamos al enemigo número uno de la piel. El sol es el principal acelerador del envejecimiento cutáneo: arrugas, manchas... Pero no se deben olvidar sus beneficios. Nos proporciona sensación de calor, bienestar físico y psíquico. Bajo sus rayos el cuerpo sintetiza la vitamina D, fundamental para el crecimiento y fortalecer los huesos. Además es un excelente antidepresivo natural, nos aporta energía y estimula el buen humor, ya que nos hace liberar endorfinas.

De este modo la piel tiene tiempo para ir acostumbrándose poco a poco a la luz solar.Para elaborar un programa solar razonable hay que habituar la piel al sol de una forma progresiva. En caso de pieles muy sensibles o con algún tipo de intolerancia solar, habrá que realizar una autovacuna: un mes antes de acudir a la playa, iniciar exposiciones muy breves y con carácter diario.

Debemos tener en cuenta nuestro tipo de piel para calcular nuestra exposición al sol:

Piel Celta. Tono claro, con pecas, seca y sensible. Suele quemarse con facilidad y casi nunca llega a broncearse. Necesita una protección 25 o 30. Alcanza el umbral para la quemadura solar a los 5 ó 10 minutos de estar tomando el sol.

Piel Germánica. Tono claro, con o sin pecas, seca o mixta. Se quema en un principio, pero después se broncea ligeramente. Necesita protección 20. Su umbral para la quemadura solar llega entre los 10 y 20 minutos de exposición.

Piel Mixta. Tono claro o marrón claro y con una tendencia general a la grasa. Se broncea bien debido a su mayor resistencia al sol. Necesita una protección entre 15 y 6, según el tiempo de exposición. Su umbral de quemadura solar está entre 20 y 30 minutos.

Piel Mediterránea. Suele ser grasa, gruesa y de tono natural marrón claro, oliva más o menos oscuro. Se broncea con gran facilidad y casi nunca se quema. Necesita una protección entre 10 y 4. Su umbral de quemadura solar está entre 30 y 45 minutos. 

Para los incondicionales del bronceado, la única opción segura es el moreno sin sol. Al margen de los rayos ultravioleta, los autobronceadores actúan como un tinte coloreando la piel. Son la única alternativa responsable para los que no quieren renunciar a su pasión por tener una piel dorada.